<span style="color: #371d0c;">1. <span style="font-weight: bold;">Su propósito no es hacerse ricos, si no tener éxito.</span> Tenemos un concepto erróneo de lo que significa tener éxito, ya que no es lo mismo que ganar mucho dinero. Los ingresos son el resultado del éxito, pero la finalidad es lo segundo. <br /> <br /> 2. <span style="font-weight: bold;">Enfrentan los problemas como nuevas oportunidades</span>. Afrontan las dificultades con optimismo, ya que el trabajo para superar los baches es una oportunidad de mejorar. <br /> <br /> 3.<span style="font-weight: bold;"> Son conscientes de que no existe la magia en los negocios. </span>Están preparados para asumir todos los esfuerzos necesarios con el fin de hacer realidad sus proyectos. <br /> <br /> 4. <span style="font-weight: bold;">Saben aprender de los errores.</span> Tienen una gran motivación y no se dejan hundir por ningún error, aunque esto suponga empezar de cero. Siempre están dispuestos a volver a intentarlo. <br /> <br /> 5.<span style="font-weight: bold;"> No esperan que surjan oportunidades, van a buscarlas. </span>Esa es la principal diferencia entre un trabajador y un emprendedor. El primero espera a que salgan plazas en una empresa para luchar por su oportunidad. El emprendedor quiere crear el mismo sus propias oportunidades.</span><br /> <br /> <br /> <span style="font-size: 6pt; font-weight: bold;">Artículo originalmente publicado por: Forbes</span>