Esta nueva rutina, (mucho más acelerada) la mantiene exactamente desde hace siete semanas, cuando fue designado como el nuevo Rector de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE). Su sencillez, ademanes pausados y la humildad en su diálogo dan pistas sobre la forma en la que toma decisiones: mediante un carácter cercano, cálido, pero al mismo tiempo firme y claro.<br /> <br /> El nuevo Rector de la PUCE (Quito, 1963) es profesor por vocación y está dedicado completamente a la docencia universitaria con temas que lo estimulan: Filosofía Política; Ética Contemporánea; Filosofía Latinoamericana e Historia del pensamiento ecuatoriano. Es el retrato de un niño sereno, optimista y alegre dedicado al Servicio Jesuita y que forjó su carrera profesional en Argentina, Cambrigde y París cuando se decidió por la teología. Reconoce que su perfil se enfocó entre el Humanismo y las Ciencias Sociales y "muy poco en los negocios y gestiones administrativas".<br /> <br /> Desde hace 31 años consagró su atención y dedicación al Servicio Jesuita en donde ha ocupado cargos como el de Director Nacional del Servicio Jesuita a Refugiados para Ecuador y Director Ejecutivo de la Corporación Sol y Justicia. Al tiempo, su visión y convicción por el Servicio Jesuita, fue ampliando su visión y llegó a coordinar todas las obras sociales en el país (27 en total) lo que representa su carta de presentación en liderazgo, manejo de estrategias, ejecución de proyectos y toma de decisiones.<br /> <br /> Esta forma de trabajar iniciaban intensos debates con sus compañeros de obras, quiénes eran tajantes al decir que las obras de la Compañía de Jesús no son un negocio. En contrapunto, Fernando Ponce defendía su postura al decir que si bien no son un negocio funcionan como un sistema empresarial y corporativo y así hay que ejecutarlo.<br /> ¡Y así lo hizo!<br /> <br /> <span style="font-weight: bold;">Adaptación, sumayor atributo</span><br /> Algunos fines de semana, el Rector de la PUCE tiene una ocupación en particular y diferente a la de otros ejecutivos; Fernando Ponce, cuando lo solicitan, cambia su chaqueta y deja su agenda universitaria por la Sotana, una Biblia y oficia una celebración litúrgica (misa) en una comunidad. Está convencido en el acercamiento hacia las personas y que desde cualquier punto de la sociedad hay que enfocarse en el desarrollo integral de la persona, cimentando los valores éticos, solidaridad y servicio.<br /> <br /> Esa es la esencia de su mensaje dominical. Además, se ha convertido su guía en su nueva función en la PUCE. "Claro que tienen que revisar las necesidades sociales para diseñar una carrera universitaria, como parte de la oferta académica y así es como se lo ha venido realizando. Los estudios son desarrollados según los nuevos tiempos y generaciones". Al hacerlo de esta manera se logra una sostenibilidad institucional.<br /> <br /> Pero hay que buscar transmitir el conocimiento de una forma más humanista, incentivar a que las personas se hagan más personas, que busquen su desarrollo personal y que esto empate con las carreras que pide el mercado. "Hay que plantear otras maneras de saber; formar estudiantes que pregunten, que cuestionen, que conozcan su historia. Esa es a veces la disyuntiva ¿provemos carreras rentables o nos enfocamos en temas humanistas? Tenemos que regresar a ver donde está tu hermano y para que nos quiere esta tierra. La Universidad Pontificia tiene una misión en enfocarse en los temas principales en el ser humano, reflexiona el nuevo Rector de la PUCE.<br />