Ha llegado el momento de repensar qué tan alineada está la estrategia de Recursos Humanos con la visión macro de negocio. Además de una táctica definida en ventas y buenas ideas, la gestión de talento debe estar en las primeras líneas de acción. Hoy por hoy, la única diferenciación para las empresas –con una oferta amplia de productos y servicios en un mercado competitivo– es el capital humano.
Las personas son acción, movilidad, desempeño y el talento es lo que da sentido a una compañía; no obstante, manejarlo es una cuestión de tiempo y decisión. Es evidente que en un escenario de bonanza económica la tarea es más sencilla, sobre todo cuando existen recursos y presupuestos que permitan gestionar, fidelizar y reconocer la inversión de los colaboradores. Pero las repercusiones financieras actuales modifican el escenario.
El contexto de una crisis mundial por la baja del precio de crudo ha afectado considerablemente a las economías regionales. Es el caso de Ecuador que enfrenta una perspectiva desafiante debido al reducido valor de sus exportaciones petroleras y una tasa de desempleo del 5,20% en el mismo periodo con un total de 419.173 personas sin trabajo a escala nacional.
Además un porcentaje de crecimiento económico en torno al 0,7% para este año, cifra proyectada por el Fondo Monetario Internacional en su último informe. Si bien los datos no son alentadores, es vital que hay que considerar: las crisis traen oportunidades y el manejo adecuado del personal es un factor de inversión que otorga valor a las organizaciones en el largo plazo.
"Una encuesta realizada por la unidad de investigación Harvard Business Analytic Services, el 60% de los especialistas en recursos humanos entrevistados dijo que un atractivo paquete de beneficios es vital al momento de reclutar y retener empleados de calidad. Sólo el 38% aseguró que un salario alto es la mejor forma de conquistar y retener talento."
Para Yaroslav Vlasak, Presidente de la Asociación de Gestión Humana de Ecuador, en los negocios y en la vida organizacional todo evoluciona, y con el avance tecnológico la transformación reciente ha sido más acelerada. Siendo conscientes de esto, el elemento que permite a las empresas ser exitosas o no es su gente. Por esto el talento juega un papel de mayor importancia, y se mezcla con el del jefe de línea. Hoy no se puede pensar en un rol de gestión de talento como una entidad; se lo debe considerar como un protagonista integral al negocio y al jefe que lo desarrolla y ejecuta en su día a día.
Se viven otros tiempos, lo sentencia Korn Ferry en un informe basado en entrevistas a más de 3.000 ejecutivos de negocios, gerentes y analistas a escala mundial, que confirma que las organizaciones que invierten sus recursos de manera eficaz en áreas de tecnología como Big Data y personal humano presentan un desempeño cinco veces más alto que otras. Considerando esta información y la recopilación de entrevistas a consultores y académicos e investigación propia, Revista Ekos presenta cinco prioridades que deben considerar las empresas en tiempos de turbulencia económica. |