Bajo la experiencia de <span style="font-weight: bold;">Ana Silva de Vázquez, Arquitecta Líder y Gerente de Casa Lista</span>, proyecto infraestructural de Mutualista Pichincha, en el plan de reconstrucción bajo ejes sectoriales orientados a atender a la comunidad siniestrada, la prioridad es restablecer la funcionalidad productiva de servicios y la movilidad, implementando umbrales con niveles de usos de la infraestructura pública a fin de asegurar las condiciones suficientes para el normal y creciente funcionamiento de las actividades económicas.<br /> <br /> “Es fundamental que profesionales idóneos y sistemas constructivos garanticen una solución habitacional sismo resistente. En zonas costeras es importante utilizar materiales que no corroan o que contengan material orgánico como la arena de mar, pues estos se degradan y producen debilitamiento de los elementos metálicos como las varillas ya que pierde reforzamiento estructural, que absorbe los esfuerzos de flexión de una construcción”.<br /> <br /> Por otra parte, bajo la perspectiva de <span style="font-weight: bold;">Juan Pablo Astudillo Cordero, Arquitecto y Director de Cuenca Ciudad Universitaria</span>, la construcción informal es una temática importante, y que a más de ser legalizada debe contar con manuales al público que aseguren una autoconstrucción de calidad.<br /> <br /> “Frente a esto la introducción y desconocimiento de materiales o sistemas ajenos a nuestra cultura, dificultan el montaje y condicionan su mantenimiento. En el último desastre se puso en evidencia un desconocimiento de materiales como el hormigón y el metal, sus mezclas, luces, secciones, calidad de los materiales y uniones, tipos de suelda, protección contra la corrosión, etc”. En el ámbito internacional, países desarrollados han incursionado en investigaciones para utilizar materiales sismo resistentes como el concreto ligero, por sus propiedades térmicas eficientes, al igual que características acústicas y resistentes al fuego, lo que permite la reducción de las cargas muertas en una estructura y que de esta manera se absorben de manera más eficaz las fuerzas sísmicas. Los materiales de infraestructuras livianas y flexibles, gracias a su alta manejabilidad y bajo peso, favorecen las operaciones de colocación ayudando a la disminución de la carga y la afectación a suelos de mala calidad. <br /> <br /> Adicionalmente, expertos aseguran que los movimientos sísmicos causan la vibración del suelo, la cual, al transmitirse al edificio y otras estructuras, ocasionan cargas horizontales, verticales y de torsión, por lo tanto se puede interpretar el efecto del sismo en construcciones como una fuerza horizontal cuyo valor se determina en función de la aceleración (intensidad sísmica) y la masa del edificio (peso). Se recomienda materiales como el hormigón, que debe estar libre de grumos o burbujas. Muros delgados de concreto pueden lograr buena adaptación al clima y densidad.